La idea de hablar todo parece ser un tanto ingenua de que realmente se puede hablar que no sea algo que ya se ha dicho, hay temas que a nadie le gusta tocar y es por la dureza de su condición, pretender que se habla de todo es una de las maneras de atraer al público, hacer lo es una de las formas más seguras de alejarlo.
Temas realmente difíciles son aquellos de los que comenzaremos a hablar, uno de ellos es la cuestión judío en la posición fascista que indica que esta etnia particular es la causante de los problemas más grandes del mundo y que no por esto debería ser exterminada puede parecer una idea de ignorantes, pero no es mas de ignorantes que la idea de una libertad que se impone prohibiendo toda forma de fascismo como idea que se realiza de manera radical la libertad se ha agotado en si misma llegando a una contradicción evidente, nadie es libre de pretender ser totalitario, entonces de entrada la libertad prometida está plagada de limites similares a este, ignorando la teoría del conocimiento donde se hace evidente lo falaz que son las pretensiones liberales, también mencionare entonces otros temas limite donde la contradicción liberal llega a su punto más doloroso, una es la conversación y el conocimiento que se genera alrededor del abuso infantil, técnicas que emplea personas para aprovecharse libremente de los menores de edad y que se discuten y se perfeccionan en blogs de bastante fácil acceso en la web, no es necesario actuar para salirse de la línea como se verá en casos como este o el anterior el simple hecho de hablar ya es algo que hace temblar las bases de lo liberal.
Como esas cosas pueden ser discutida por seres racionales, simplemente por una razón por que la libertad es un valor irracional que transforma a las personas en seres irracionales, y que si lo racional deja de tener un límite deja también de ser racional, temas que mencionare simplemente para levantar curiosidad son los siguientes: las hipótesis construidas a partir de mediciones indirectas en la medicina, la independencia de los procesos informacionales, la estructuración de paradigmas durante la investigación científica, los derechos de consumo de los seres humanos, cada uno de estos temas se sitúa en la línea donde se hace evidente de que para ser tolerante es ilógico exigir que no existan intolerantes.